Los tecnócratas han cautivado a los políticos, y ambos son cautivos de los mercados y la UE ha caído en la trampa de renunciar a las políticas neo keynesianas, incorporando la “regla de oro” en las constituciones. El resurgir de unas políticas distintas a las neoliberales, no se podía permitir desde los centros de poder de Wall Street, es por ello que han presionado y el miedo de la gente a las largas noches negras de la historia, ha dejado quese perpetuara sin estruendos esos cambios y los déficit de legitimidad se han reducido a una esperanza de un día con más democracia.
Se ha puesto cómo modélico el sistema alemán, pero se conocen poco sus elementos negativos, y es bueno conocer que los salarios no se han alterado en términos reales en veinte años,y es significativo que el peso del salario en los bienes exportados sea de un reducido 0,3%. Los alemanes están pasando por un proceso como Japón de los años 80.
Esta política se une a las prácticas de deslocalización que han trasladado a sus vecinos del Este y del continente asiático, la fabricación de sus componentes industriales, conservándose el montaje final. Este proceso ha dado grandes beneficios a las empresas alemanas que inteligentemente han invertido I+D, superado sólo por Suecia y Japón, con una inversión de 2,6% del PIB en el 2008 en este concepto.
Así, son competitivos y han logrado que sus exportaciones a la UE sean del 11% de su PIB. Su dimensión exportadora es creciente y supera en más del 7% a las importaciones. Esta situación favorece a la exportación de capital, invierte fuera sus beneficios excedentes, y por eso sus riesgos están más fuera que dentro, porque su consumo interno es bajo, y de ahí que necesite asegurarse el pago de lo que prestado.
Son alemanes, pero de tontos, ni un pelo. Ahora su modelo es el mejor, es la regla a copiar, lo malo es que no tenemos la misma cultura. La imposición del hacer germánico se ha impuesto, Merkel ha vivido su infancia y estudios en la Alemania del Este, donde el bienestar tenía otro significado, porque lo más importante era la estructura del sistema, y lo que aprendió, lo ha trasformado en un principio neoliberal/dictatorial financiero que se lo han dictado desde otro centro de poder. No es bueno vivir bajo un temor, ni político, ni financiero, ni religioso o de cualquier otro modo de opresión.
