¡Silencio! Nos mandan

En Davos un año más, se han reunido los que mandan en el mundo económico, que es como decir, los que imponen hoy las políticas a los gobiernos. Nadie quiere pasar desapercibido y cada año se espera una visión del mundo, para proyectar lo que ocurrirá en la economía de ese año. Así, que si hacemos caso al todo poderoso David Rubinstein, del Carlyle Group, y a John Paulson, gestor de hedge funds, podemos tomar nota de que “Europa es una bomba, pero también una oportunidad”, y es que los buitres financieros han sobrevolado Davos, han observado el panorama, y han confirmado ordenes de compra con fuertes descuentos, para negociar su rembolso con esplendidas ganancias.
Davos lleva muchos años funcionando (1971), y pasan todos los años los políticos de turno, intelectuales, financieros, ejecutivos, los únicos que siguen año tras año, son los del 1%, porque tienen el dominio de la economía mundial.


En Davos, ya se han olvidado de la cooperación al desarrollo, porque están centrados en el déficit cero, son los ajustes presupuestarios la estrella de las reuniones y quien los aplicará con más ortodoxia. De un plumazo, la crisis ha arrinconado el desarrollo humano y económico del Sur, los problemas alimentarios, las complejas políticas energéticas y la crisis medioambiental. Todo eso a cambio del equilibrio presupuestario. Hay que salvar a las grandes corporaciones y sus bancos, al euro y el dólar, antes que buscar soluciones para los más débiles.
Sólo preocupa la deuda, el equilibrio de las cuentas, aunque el mundo de norte a sur, esté que explote, no importa lo que diga la indignación de los ciudadanos, ni los occupy Wall Street, o la City, ni Oklahoma, ni el mundo árabe, sólo preocupa el mantenimiento de la política neoliberal, aunque su resultado sea un mundo con mil millones de hambrientos.

Compártelo en tus redes: These icons link to social bookmarking sites where readers can share and discover new web pages.
  • Facebook
  • Twitter
  • LinkedIn
  • Reddit
  • Print
  • email
  • Google Bookmarks

Deja un comentario